De Bikaner a Jaisalmer

20 de julio de 2011

La manyana en Bikaner es distinta a todo lo visto. Soplan vientos del desierto. Calientes.

Por la noche se celebraba una fiesta de cumpleanyos en la acera de enfrente del hotel y tenia miedo de no poder dormir (otra vez) pero acabo pronto y no hubo ningun problema. Sonaba musica tipo Bollywood, jeje.

Nos levantamos para ducharnos e ir a desayunar y no nos entra la comida... que raro, no? al volver a la habitacion el estomago nos da la lata... por la comida india? no, por la nuestra. Es que hay que ser gafe... se ve que el embutido no aguanta tanto tiempo fuera de la nevera. Nosotros lo hemos comprobado.

La carretera a Jaisalmer es infinitamente recta e infinita, bastante buena, la verdad, y sin trafico, y aunque en estas carreteras no existe limite de velocidad, nosotros nos mantenemos en los 90km/h, maximo 100km/h. Y nosotros sonyando en probar un Ferrari por aqui...

Empezamos a notar que nos adentramos en zona desertica, pues cada vez hay menos arbolitos, y pasamos a ver mogollon de camellos, rebanyos de cabras con algun burrito camuflado, etc. Hasta vemos un oasis! y no era un espejismo, jeje.

Como en toda la carretera no hay NADA, llenamos el deposito antes de salir, compramos agua fresquita y todo. Y nosotros sufriendo por el estomago, pero aguantamos como unos campeones.

Lo mejor de la carretera es ir viendo animales, mas que nada porque no hay nada mas... pero lo de ver alguna gacela saltar a lo lejos es divertido, aunque me quedo con los burritos.

Lo que vemos mucho tambien son pasos a nivel, pero esta vez automaticos, aunque las casetas de los guardas son 4 palos con 4 trozos de paja. Y llegando a la ciudad vemos los primeros pasos de peatones!!! que aunque no sirvan para nada, ahi estan.

Jaisalmer esta practicamente en el desierto del Thar y la llaman la ciudad dorada, por la piedra que se usa en la construccion. No hay NADA que sea de otro color. Ademas, con el viento que sopla, vemos bastantes parques eolicos.

Llegamos a la hora de comer, asi que le pedimos a Ikram, nuestro chofer y guia, que nos lleve al restaurante Trio, recomendado por la guia y muy anunciado por la ciudad mediante carteles. Quedamos satisfechos, y el servicio era muy bueno. Probamos pollo (otra vez) cocinado de otra forma, esta vez Tandoori pollo, muy rico y adecuado para el dolor de estomago, ya que no tiene salsa. Como ya sabemos un poco como va todo, pedimos nosotros mismos anis para hacer la digestion. Es mano de santo.

Vista del fuerte desde el restaurante Trio:

Resulta que el hotel esta dentro del fuerte de Jaisalmer, y el coche no puede entrar, asi que montamos las maletas en un tuc-tuc (aqui llaman asi a los Rickshaw) y subimos una cuesta super empinada hasta el hotel. Rellenamos los papeles de siempre, con el numero de pasaporte, y todo eso y nos ensenyan la habitacion. Como el hotel esta vacio (temporada baja), nos toca la suite deluxe, ou yeah. Estamos encantados. La habitacion esta muy bien decorada, las paredes son de piedra y las vistas son envidiables, se ve tooooda la ciudad si te sientas en el alfeizar entre cojines :)

Vista del fuerte con nuestra habitacion arriba, el torreon que tiene una sola ventana:

De 5 a 6 damos una vuelta por el fuerte, para controlar un poco donde estamos, y a las 6 nos espera Ikram fuera del fuerte con el coche. Antes de que llegue nos acercamos a una tienda donde parece que tienen internet y nos empezamos a enredar. Me piden que les escriba unas frases en espanyol y despues nos hacen entrar en la tienda a tomar te. Bueno, te indio, es decir Chai, que es te con leche, especies, etc. Hasta yo tomo y me gusta. En realidad todo es "marketing" para que les compremos algo, pero nosotros decimos que tenemos prisa y nos vamos. Ha sido interesante estar en la trastienda con un indio del desierto tomando Chai, si, si.

Ikram nos quiere ensenyar donde los artesanos trabajan con plata, en sus casas, y nos lleva a ver a uno de ellos. Nos mete un poco el rollo de como la trabajan y eso y despues nos hace subir a una habitacion con colchones en el suelo. Nos ensenya como distinguir la plata mala de la buena mediante una piedra negra especial (no quiso dar mas detalles) y nos empieza a sacar primero pendientes, despues pulseras, despues esclavas, colgantes de piedras... infinidad de cosas. Ibamos seleccionando lo que nos interesaba, pero al decir el precio total, nos parecio desorbitado y no hubo manera de negociar con el, asi que nos fuimos sin nada. No nos arrepentimos. Existe Jaipur, donde parece que esta TODO.

Despues de la plata vamos a tomar algo al hotel "Desert Dreams", regentado por un amigo de Ikram, un musulman del desierto muy charlatan llamado Miru. Nos sentamos en la terraza de la azotea a beber algo y nos ensenya fotos y escritos de gente que ha ido al desierto con el y nos convencio rapido. Tenia mucha labia. Quedamos en ir con el al dia siguiente.

En la terraza del hotel de Miru:

Nos cuenta que en el desierto, al no tener ni television ni nada, lo que se hace es reunirse alrededor de los mayores a escuchar historias. Me pregunta a que me dedico, y al decirle que soy ingeniera, se rie y me propone un acertijo que segun el, la gente del desierto resuelve en 5 minutos usando los dedos. A mi me da tiempo hasta al dia siguiente al mediodia (eran las 21h mas o menos).

Aqui os lo dejo:

"Estos son los precios por cada animal: camello-4 rupias, caballo-0,5 rupias y burro-0,25 rupias.

En total una persona ha comprado 20 animales de estos 3 tipos y se ha gastado 20 rupias exactas. Como minimo ha comprado uno de cada. Sabriais decirme cuantos camellos, cuantos caballos y cuantos burros?"

Como se nos hace tarde, cenamos ahi mismo, unos sandwiches de queso y Lassi para beber (como un batido de iogurt de distintas frutas, la cosa mas rica... y adictiva...)

Nos quedamos hasta las 22h, cuando mi estomago dice basta. Volvemos al hotel y subimos caminando por el fuerte, donde nos espera nuestro querido "chico para todo" Nepali, encantador.